SERGIO BARCE
Pre-textos, 2006
Entrañable narración, entremezclando recuerdos,
deseos, emociones, soledades....destacando la impotencia ante el inevitable
fluir del tiempo, que, cual reloj de
arena, al acercarse al final cae mucho más rápido. Novela ganadora del I Premio
Tres Culturas de Murcia, tiene como fondo algo ya perdido, roto, pero añorado
por el autor y puesto en boca de sus personajes: la apacible conjunción de tres
visiones del mundo, las tres culturas del Libro, que en la vida cotidiana
convivieron durante siglos en relativa
paz y armonía. No es esta obra un ensayo, sino una novela, y por tanto no vamos
a debatir si esta armonía fue real o no, y si es posible que lo siga siendo. Pero al menos, la admitiremos como algo
vivido, deseado y soñado por alguien.
Como es habitual en el autor, nacido en Larache
(Marruecos), la novela está alternativamente enmarcada en Larache y Málaga,
ciudad a la que se trasladó Sergio Barce con su familia, en su infancia, cuando
Marruecos puso muy complicadas las cosas a los españoles nacidos allí y que se
consideraban como larachenses.
En la vida de Abel Egea, un viudo jubilado a las
puertas de la vejez, irrumpen Nadja y su bebé Zacarías , emigrantes llegados
ilegalmente en una patera con la ilusión de una nueva vida y una mochila llena
de tristezas.
Abel, un larachense de origen español, afincado en
Málaga, sobrevive duramente al dulce recuerdo se su fallecida esposa, Carlota,
y a la lejanía de su única hija, afincada en Suecia, apoyándose en viejos amigos, como David Benasuly, también procedente de
Marruecos, y Lidia Andrade, atractiva mujer madura que conforta a ambos en sus
soledades. Pero Abel también sobrevive al hecho de verse desarraigado del país
que considera su patria chica, su espacio vital, y que contiene los mejores
recuerdos de su vida.
El encuentro con la jovencísima y bella Nadja, que
podría ser su hija, despierta en Abel un aluvión de sentimientos que
difícilmente puede controlar. Se siente padre, abuelo, amante, ...y siente que
vuelve a su Marruecos natal, al aspirar el perfume especiado de las comidas que
Nadja le prepara. Un país donde transcurrió felizmente su infancia, su
juventud, donde se enamoró y se casó, y donde nació Alicia, la única hija que
ahora vivía con su marido sueco en el lejano norte.
La novela se estructura en dos narraciones
paralelas: el encuentro, convivencia y problemas de Abel en su relación con
Nadja y el pequeño Zacarías, y el retorno a Marruecos en búsqueda de un pasado
que ya no existe, del que solo quedan ruinas. Sin embargo, ese viaje resulta
ser terapéutico y Abel recupera fuerzas para afrontar lo que le queda de vida
con ánimos renovados.
De impecable factura, la narración cautiva y
emociona sin caer en fáciles recursos melodramáticos. El lector, tenga o no
relación con Marruecos, puede comprender perfectamente la sensación de
desarraigo y abatimiento, que es universal, y que todo emigrante lleva consigo.
Y también puede comprender o al menos imaginar, ese armónico concurso de
opciones vitales, de visiones del mundo que oferta la diferencia, la
multiculturalidad entendida no como una visión política, sino humana, muy
humana.
Sergio
Barce Gallardo ( Larache, 1961) poeta y escritor español,
presidente de la asociación Larache en el Mundo. Su primera novela ‘En el
Jardín de las Hespérides’ (Aljaima, 2000) fue un primer acercamiento al universo de Larache al que siguió
‘Últimas noticias de Larache’
(Aljaima, 2004). Fue ganador del Primer Premio de Novela Tres Culturas de
Murcia por su obra ‘Sombras en sepia’, (Editorial Pretextos, 2006).
Finalista del Premio de la Crítica de Andalucía de 2012 con ‘Una sirena se
ahogó en
Larache’ (Círculo Rojo,2011), ‘El libro de las palabras
robadas’ (Circulo Rojo, 2013 ). ‘Paseando por
el Zoco chico. Larachensemente’ fue
su último libro editado en 2014 en Valencia. Recopila los relatos escritos en
los últimos 15 años relacionados con Larache.
Ariodante