LA SAGA DE LOS
LONGEVOS II
Eva García Sáenz
E-Book y Papel
Auto edición
Después de leer con verdadero interés la original e inclasificable
historia de La saga de los longevos ( La
Vieja Familia), se nos presenta ahora una segunda parte, intuida al llegar
al final de la anterior novela. La autora ha seguido sus propios pasos usando
el mismo procedimiento de edición: primero la ha publicado por su cuenta y
riesgo, tanto en papel como libro electrónico. El libro, en sus dos versiones
puede encontrarse en Amazon.
La narración comienza fuerte y el ritmo no decae ni un momento. Como
en la anterior, la estructura tiene como base una intriga contemporánea, mucha
acción, con una serie de personajes, los longevos, y otros que no pertenecen a
esa categoría, como Adriana, la esposa de Iago/Urko. Alrededor de esta estructura, giran una serie
de saltos al pasado, que irán explicando parte de lo que no sabemos y dándole
pistas al lector sobre los próximos pasos o escenas venideras, aunque algunas
de las pistas son engañosas, todo hay que decirlo. No se fíen.
No sólo aparecen nuevos miembros de la Vieja Familia, como Gunnarr,
(el hijo de Urko/Iago, supuestamente muerto), sino que también aparecen otros
longevos que no pertenecen a esta familia, lo cual crea una situación de
tensión y expectación importantes. Y tanto unos como otros, están muy
interesados en investigar el gen de la longevidad y tratar de encontrar la
manera de dominarlo.
Para los que aún no han leído esta Saga, hay que decir que los
llamados longevos son humanos que
tienen alterado el gen del envejecimiento, y llegada a una edad aproximadamente
la treintena, se mantienen así durante años, siglos ¡y milenios! Son también
inmunes al cáncer, y a muchas enfermedades, virus y bacterias,...pero no son
inmortales. Pueden morir, generalmente por muerte violenta, nunca de muerte
natural. Es decir, son algo así como los Titanes, en la mitología clásica,
seres medio hombres medio dioses, en el sentido que sus muchísimos años de vida
les proporciona un amplísimo conocimiento, y unas capacidades de supervivencia
enormes. Pero también les convierte en seres errantes, y salvo que encuentren
otra persona longeva de sexo opuesto, sus matrimonios con lo que ellos llaman efímeros resultan penosamente poco
duraderos, y están condenados a ver morir a cónyuges e hijos. Pero por lo
demás, tienen los mismos sentimientos y anhelos, aman y odian, ambicionan el
poder y el dinero, y lo consiguen, lo que les permite una libertad amplísima.
Pero tampoco tienen el más mínimo inconveniente en matar, si eso les conviene o
les defiende. Pueden ser tan buenos o tan malos como el resto de los humanos.
La irrupción de los Hijos de Adán, otra familia de longevos, explica
el esquivo y oscuro comportamiento de Lür. Y con el viajamos a miles de años
atrás, a la época de las últimas glaciaciones, en alguna parte cercana a la
actual Dinamarca. También viajamos a una tribu del África central, a Pompeya justo antes de la explosión del
Vesubio, a la Inglaterra que prepara el viaje del Mayflower, conocemos las calamidades y agobios sufridos por los
peregrinos en tierras americanas, acompañamos a Urko/Ely a cazar castores, y a
conocer a Manon, entre otras cosas… pero siempre volvemos a Santander, al Museo
Arqueológico de Cantabria, que los supuestos hermanos Del Castillo dirigen,
aunque también viajaremos a París, a tierras escocesas y americanas, donde
tienen lugar situaciones de gran tensión y fuerza dramática.
La autora evoca, con todas estas pinceladas de historia, las
ancestrales potencias del matriarcado y patriarcado, y su pugna primigenia,
legendaria o real. Asimismo, los cuatro personajes que componen la Vieja
Familia longeva, (una vez muertas Boudicca y Lyra) son asimilados
simbólicamente a los cuatro elementos clásicos: Agua, Fuego, Tierra y Aire.
Cada uno de ellos se siente más cercano a uno de estos elementos, creando así
unos arquetipos definitorios del carácter de los personajes, que rozan la
leyenda y la mitología.
Paralelamente, el desarrollo de las investigaciones científicas en
torno a la longevidad, entra de lleno en la ciencia ficción, dando visos de
verosimilitud al resto de la narración,
si bien en esta segunda parte se echan en falta algunas de las explicaciones
más detalladas sobre el tema, que se dan por supuestas, para lo cual conviene
leer antes la primera parte.
Tenemos, pues, una narración muy atractiva, inclasificable, aunque
tenga conexiones con la novela histórica, con el thriller, con la ciencia
ficción ...y que atrapa al lector desde las primeras páginas, prometiendo
continuación. Y con las ventajas de su fácil acceso y distribución a través de
internet.
Ariodante